17. 3. 2022

Cerramiento de terraza de acordeón, 5 ideas inspiradoras

El cerramiento de terraza de acordeón, es una excelente opción para amplias terrazas y escaparates, con la que consigues unas impresionantes vistas sin obstáculos, de una forma práctica que te aporta muchas ventajas.

¿Qué es un cerramiento acordeón?

Cuando hablamos de un cerramiento acordeón, nos estamos refiriendo a instalaciones de cortinas de cristal como el modelo Gravital 400, cuyos paneles pueden ser apilados gracias a sus cambios de ángulo de 90º a 180º.

De esta forma, podemos apilarlos entre sí, quedando de forma similar a un acordeón y ocupando el mínimo espacio, para así poder disfrutar de la terraza o de ese espacio de la mejor forma posible.

En el modelo Gravital en concreto, los paneles colgantes pueden ser manejados de forma sencilla con una sola mano y con todas las opciones de apilamiento que necesites. Así puedes colocarlos en cualquier lado del sistema y ahorrar sitio, para dar una sensación insuperable de espacio al aire libre.

Beneficios de un cerramiento tipo acordeón

El cerramiento de tipo acordeón es el que ocupa menos espacio, por lo que cuando consideres apilar los paneles, vas a conseguir un efecto de apertura perfecto.

El apilamiento es personalizable, así que en cualquier momento puedes aprovecharlo como estimes conveniente. Con un sistema cómodo y rápido, para que no tengas que hacer ningún esfuerzo.

Mientras el cerramiento acordeón está instalado sin apilarse, el resultado es espectacular. El modelo Gravital, por ejemplo, permite la instalación de paneles de hasta 4 metros de altura y 1,2 metros de ancho.

Ya que no cuenta con perfiles verticales, es posible disfrutar de las vistas sin obstáculos. Esto lo presenta como la opción ideal en escaparates, restaurantes o incluso terrazas particulares.

Estas instalaciones se pueden aprovechar en cualquier espacio, incluso en suelos inclinados o con desniveles. Si es necesario, también pueden instalarse sin guía inferior y ofrecer una completa transición de suelos, muy recomendable para facilitar el acceso a personas con movilidad reducida.

También pueden deslizarse alrededor de las esquinas, para así ofrecer una visión frontal total, en todas direcciones y sin obstrucciones.

Además de estos beneficios, el cerramiento tipo acordeón cumple perfectamente con las necesidades de aislamiento, protegiendo el espacio interior de las condiciones climatológicas que haya en el exterior. Así podrás disfrutar de la terraza protegida durante todo el año y, si quieres disfrutar del buen tiempo, apilar los paneles cuando lo necesites.

5 ideas de cerramiento autoportante para tu terraza

Un cerramiento autoportante de tipo acordeón ofrece infinidad de beneficios para tu terraza, comenzando por una máxima personalización en los acabados.

En Kauma te ofrecemos una amplia variedad de opciones, desde cientos de lacados en brillo, mate y texturizados, hasta recubrimientos anodizados o un efecto de imitación de la madera que te encantará.

Valora la opción de tener una puerta integrada abatible de una o dos hojas, en cualquier punto del cerramiento que tú quieras. A la hora de apilar los paneles, la puerta también se puede apilar como todos los demás.

Para una mayor privacidad, puedes instalar cortinas enrollables o plisadas, con el acabado que mejor encaje con tu estilo. Ideal tanto para los días en que mantienes el cerramiento autoportante sin apilar pero hace demasiado sol o simplemente para conseguir ese espacio privado que estás buscando.

Si quieres un suelo  perfecto en la terraza con cerramiento autoportante, puedes elegir la tarima tecnológica, disponible en diferentes símiles de madera.

Disfruta de su calidez y sofisticación, al mismo tiempo que cuentas con su alta resistencia y durabilidad. Es sencilla y rápida de montar, sin necesidad de hacer obras. Su combinación de madera y polímeros reciclados añadirá un toque especial a tu terraza.

Para aprovechar al máximo el espacio, un cerramiento acordeón podemos incluso prepararlo de forma que se esconda en una falsa pared cuando lo apiles, de manera que no se verá en absoluto.